Redes Sociales

siguenos en facebook siguenos en Twitter sígueme en Blogger Sígueme en Likedin Sígueme en Pinterest Canal de youtube

RVI: HAGEO

Referencias para la lectura:

-       Texto actualizado al español latino.
-       Ubicación visual de vocablos claves resaltados en colores.
-       Sinónimos de palabras claves entre corchetes [color bordó]
-       Texto entre comillas y asterisco «expresión»* refiere a una frase en español equivalente a la frase hebrea de dicho texto.
-       Subtitulado tradicional actualizado

Algunos vocablos han retenido su valor de traducción original del hebreo.
Para complementar su lectura considere el uso de un diccionario Hebreo – Español para el AT, y un diccionario Griego – Español para el NT.


Para un estudio exhaustivo, recomendamos utilizar RVIC Reina Valera Independiente Codificada con diccionarios léxicos para una ampliación de significados y conceptos.

HAGEO

Exhortación a edificar el templo
(Hag 1:1) En el año segundo del rey Darío, en el mes sexto, en el primer día del mes, vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo a Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y a Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, diciendo:

(Hag 1:2) Así ha hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: Este pueblo dice: No ha llegado aún el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada.

(Hag 1:3) Entonces vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:

(Hag 1:4) ¿Es para ustedes tiempo, para ustedes, de habitar en sus [de ustedes] casas artesonadas, y esta casa está desierta?

(Hag 1:5) Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Mediten bien sobre sus [de ustedes] caminos.

(Hag 1:6) Siembran mucho, y recogen poco; comen, y no se sacian; beben, y no quedan satisfechos; se visten, y no se calientan; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto.

(Hag 1:7) Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Mediten sobre sus [de ustedes] caminos.

(Hag 1:8) Suban al monte, y traigan madera, y reedifiquen la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová.

(Hag 1:9) Buscan mucho, y hallan poco; y encierran en casa, y yo lo disiparé en un soplo. ¿Por qué? dice Jehová de los ejércitos. Por cuanto mi casa está desierta, y «cada uno»* de ustedes corre a su propia casa.

(Hag 1:10) Por eso se detuvo de los cielos sobre ustedes la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos.

(Hag 1:11) Y llamé la sequía sobre esta tierra, y sobre los montes, sobre el trigo, sobre el vino, sobre el aceite, sobre todo lo que la tierra produce, sobre los hombres y sobre las bestias, y sobre todo trabajo de manos.

(Hag 1:12) Y oyó Zorobabel hijo de Salatiel, y Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y todo el resto del pueblo, la voz de Jehová su Dios, y las palabras del profeta Hageo, como le había enviado Jehová su Dios; y temió el pueblo delante de Jehová.

(Hag 1:13) Entonces Hageo, enviado de Jehová, habló por mandato de Jehová al pueblo, diciendo: Yo estoy con ustedes, dice Jehová.

(Hag 1:14) Y despertó Jehová el espíritu de Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el espíritu de Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y el espíritu de todo el resto del pueblo; y vinieron y trabajaron en la casa de Jehová de los ejércitos, su Dios,

(Hag 1:15) en el día veinticuatro del mes sexto, en el segundo año del rey Darío.

La gloria del nuevo templo
(Hag 2:1) En el mes séptimo, a los veintiún días del mes, vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:

(Hag 2:2) Habla ahora a Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y a Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y al resto del pueblo, diciendo:

(Hag 2:3) ¿Quién ha quedado entre ustedes que haya visto esta casa en su gloria primera, y cómo la veis ahora? ¿No es ella como nada delante de sus [de ustedes] ojos?

(Hag 2:4) Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también, Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote; y cobren ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y trabajen; porque yo estoy con ustedes, dice Jehová de los ejércitos.

(Hag 2:5) Según el pacto [alianza, convenio, acuerdo] que hice con ustedes cuando salieron de Egipto, así mi Espíritu estará en medio de ustedes, no teman.

(Hag 2:6) Porque así dice Jehová de los ejércitos: De aquí a poco yo haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra seca;

(Hag 2:7) y haré temblar a todas las naciones, y vendrá el Deseado de todas las naciones; y llenaré de gloria esta casa, ha dicho Jehová de los ejércitos.

(Hag 2:8) Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos.

(Hag 2:9) La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera, ha dicho Jehová de los ejércitos; y daré paz en este lugar, dice Jehová de los ejércitos.

La infidelidad del pueblo es reprendida
(Hag 2:10) A los veinticuatro días del noveno mes, en el segundo año de Darío, vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:

(Hag 2:11) Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Pregunta ahora a los sacerdotes acerca de la ley, diciendo:

(Hag 2:12) Si «alguno»* llevare carne santificada en la falda de su ropa, y con el vuelo de ella tocare pan, o vianda, o vino, o aceite, o cualquier otra comida, ¿será santificada? Y respondieron los sacerdotes y dijeron: No.

(Hag 2:13) Y dijo Hageo: Si un inmundo a causa de cuerpo muerto tocare alguna cosa de estas, ¿ será inmunda? Y respondieron los sacerdotes, y dijeron: Inmunda será.

(Hag 2:14) Y respondió Hageo y dijo: Así es este pueblo y esta gente delante de mí, dice Jehová; y asimismo toda obra de sus manos; y todo lo que aquí ofrecen es inmundo.

(Hag 2:15) Ahora, pues, mediten en su [de ustedes] corazón desde este día en adelante, antes que pongan piedra sobre piedra en el templo de Jehová.

(Hag 2:16) Antes que sucediesen estas cosas, venían al montón de veinte efas, y había diez; venían al lagar para sacar cincuenta cántaros, y había veinte.

(Hag 2:17) Les herí con viento solano, con tizoncillo y con granizo en toda obra de sus [de ustedes] manos; mas no se convirtieron a mí, dice Jehová.

(Hag 2:18) Mediten, pues, en su [de ustedes] corazón, desde este día en adelante, desde el día veinticuatro del noveno mes, desde el día que se echó el cimiento del templo de Jehová; mediten, pues, en su [de ustedes] corazón.

(Hag 2:19) ¿No está aún la simiente en el granero? Ni la vid, ni la higuera, ni el granado, ni el árbol de olivo ha florecido todavía; mas desde este día los bendeciré.

Promesa de Jehová a Zorobabel
(Hag 2:20) Vino por segunda vez palabra de Jehová a Hageo, a los veinticuatro días del mismo mes, diciendo:

(Hag 2:21) Habla a Zorobabel gobernador de Judá, diciendo: Yo haré temblar los cielos y la tierra;

(Hag 2:22) y trastornaré el trono de los reinos, y destruiré la fuerza de los reinos de las naciones; trastornaré los carros y los que en ellos suben, y vendrán abajo los caballos y sus jinetes, «cada cual»* por la espada de su hermano.

(Hag 2:23) En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, te tomaré, oh Zorobabel hijo de Salatiel, esclavo [siervo, sirviente] mío, dice Jehová, y te pondré como anillo de sellar; porque yo te escogí, dice Jehová de los ejércitos.



LIBROS MAB

INTERLINEALES ELECTRONICOS

CONCORDANCIA MANUAL Y DICCIONARIO TRADUCTOR GRIEGO ESPAÑOL

NT INTERLINEAL GRIEGO - ESPAÑOL